Big Bands en Málaga

El pasado viernes 23 por la tarde tuvo lugar en el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga un concierto gratuito de dos Big Bands de Jazz malagueñas: la Big Band del conservatorio Manuel Carra y la Insostenible Big Band.

Agradado por el evento me decidí asistir. Me gusta el Jazz y aunque no lo conozca bien, el Jazz de Big Bands que he escuchado me gusta mucho.
Siempre le prestaba atención a los grandes intérpretes de un instrumento, pero escuchar una gran orquesta, una big band o una orquesta sinfónica es algo espectacular, ¡cómo un número elevado de instrumentistas pueden trabajar como un equipo perfectamente sincronizado y producir sonidos tan bellos!
Por supuesto conozco el sonido de las Big Bands por las grabaciones de Glenn Miller, pero cuando de verdad me llamó la atención fue después de escuchar repetidas veces la Afro-Cuban Jazz Suite de Chico O’Farrill, tema que incluyó Fernando Trueba en Calle 54, genial tema y estupendas imágenes.
Aquí os dejo un vídeo para que lo disfrutéis:

Bien, a lo que iba.

El concierto se celebró en una sala bien acondicionada donde podían entrar 150 personas sentadas en sillas. En primer lugar tocó la Big Band del conservatorio Manuel Carra y después la Insostenible, que no pudo traer a su cantante como tenían previsto así que tuvieron que cambiar el repertorio.
Finalizaron tocando las dos juntas un par de temas.

En general el repertorio fue el típico de las Big Bands clásicas, aunque hubo temas que yo no conocía: in the mood, moonlight serenade, etc.

La actuación de la primera banda no la pude ver porque llegué algo tarde y no me permitieron entrar porque el aforo estaba lleno. Cuando terminó su actuación hubo gente que salió y entonces me dejaron entrar así que vi la actuación de la Insostenible y de las dos en conjunto.
Sinceramente, en la sala había sitio de sobra, no sillas pero sí sitio, así que no entiendo bien que no dejen a una, dos o tres personas entrar. Además en un concierto de este tipo la sala se llena sólo con la presencia de las familias de los músicos, ya que son gente muy joven y la familia está loca por verlos tocar en un concierto y trajeaos. Deberían prever esto.

Aparte de esta pega, el concierto me pareció muy bueno, duró una hora aproximadamente (sin contar la primera actuación), tiempo justo para gustar y no cansar, y el ver tocar en directo siempre gusta.
Animo desde este pequeño rincón del universo digital a continuar haciendo eventos de este tipo.